El reflujo en bebés
El reflujo en bebés
Si estás amamantando a tu bebé no hay ninguna razón para dejar de hacerlo cuando tiene síntomas de reflujo.
Si estás amamantando a tu bebé no hay ninguna razón para dejar de hacerlo cuando tiene síntomas de reflujo. Te daremos unas recomendaciones para manejar el reflujo en bebés.
Si ya dejaste de darle el pecho y en cambio ya le das la mamadera, hay varias leches maternizadas diseñadas específicamente para bebés con reflujo. Pregúntale a tu médico para más información. La leche más espesa funciona en muchos bebés con reflujo, pero en otros no tiene efectos tan contundentes. Algunos incluso la suelen rechazar aún más.
Reflujo en bebés: Posiciones para alimentarlo
Algunas mamás que amamantan encuentran una solución en “la posición de los gemelos” (debajo del brazo). Otra posición recomendada, si tu bebé es un poco más grande, es sentado derecho en tu falda. Si le das tetero trata de mantenerlo en una posición derecha.
Intenta establecer una rutina de comida/juego/sueños para darle tiempo a digerir la leche antes de acostarlo para dormir. Trata de evitar que tu bebé se duerma mientras come ya que de lo contrario su siesta se acortará por los dolores.
Algunos bebés aprenden que la leche que quieren también es la fuente de su dolor y son reacios a tomarla o pueden desprenderse varias veces mientras se los alimenta. Otros, en cambio, la sienten calmante mientras la toman y lo quieren hacer más frecuentemente (alimentación para confortarse).
Aquí hay algunos consejos para la hora de la comida que te pueden ser útiles; la prueba de acierto y error es la clave hasta que encuentres la que funcione para ustedes dos:
- Alarga el tiempo entre las comidas, o alternativamente acorta estos periodos y ofrécele menos.
- Trata de alimentarlo de un solo pecho o de ambos pechos, pero con una pequeña pausa en el medio.
- En el caso de bebés mayores puedes probar terminando su comida con una pequeña cantidad de sólidos: se considera que esto ayuda a mantener la leche abajo. Los bebés más pequeños pueden comer una pequeña cucharada de leche espesa (en polvo o de pecho).
- Si estás amamantando tal vez convenga evitar algunas comidas que pueden pasar a través de tu leche y afectar a tu bebé. Se considera que ciertos alimentos pueden tener algún efecto en el reflujo de tu bebé: los productos lácteos, la cafeína, los picantes, las grasas y las comidas ácidas. Si quieres seguir una dieta, consulta siempre primero con tu médico.
- Los bebés con reflujo se distraen fácilmente a la hora de la comer, por lo que es recomendable que trates de hacerlo en un ambiente tranquilo o un cuarto más oscuro.
Juegos para bebés de 13 a 24 meses: bailando.
A los bebés les encantan los sonidos diferentes y la música. Además, bailar estimula el desarrollo de su coordinación y el sentido del equilibrio del bebé. ¡A bailar en familia!
Elijan distintos estilos de música y háganselos escuchar de a uno por vez.
Dejen que baile como él quiera. Cambien la música y observen cómo su bebé cambia sus movimientos para bailar al ritmo de la nueva melodía.
Incentívenlo a aplaudir y zapatear. Explíquenle que cuando la música deje de sonar, deberá sentarse.
Apaguen la música y observen cómo reacciona.
Prueben ponerle algunas canciones infantiles, que tengan una rima fácil de imitar.
Motívenlo a cantar con ustedes. De esa manera, estimularán su
capacidad comunicativa y lo prepararán para el habla.
Establezcan una rutina de canciones. Pónganlas varios días seguidos y verán cómo su bebé las reconoce instantáneamente en cualquier ocasión que las escuche.